Tras perder con Boca, el dolor de Chiquito Romero sobre los insultos del hincha

Racing quedó eliminado de la Copa Libertadores a través la tanda de penales, donde Sergio Romero le ganó el duelo a Gabriel Arias, se hizo enorme y metió al Xeneize en la próxima ronda tras igualar 0-0 frente a la Academia en el Cilindro de Avellaneda.

El ex-Racing  definió la llave con Boca por los cuartos de final al contener dos penales y darle el pase a las semifinales del máximo certamen internacional al Xeneize en el Estadio Presidente Perón. Tras terminar el partido, habló con los medios: “No es raro que no haya festejado porque soy hincha de Racing, y amo a este club. Esa es mi realidad.

Al finalizar el encuentro producto del potente disparo de Rojo, no festejó debido a que es un reconoció hincha de Racing y explicó esa decisión aunque también se mostró dolido por la recepción que tuvo por parte del público presente en el barrio de Avellaneda. “No puedo festejar porque soy hincha de este club pero hoy defiendo esta camiseta”, dijo Romero

"Muchísimas sensaciones encontradas. Me voy con dolor y tristeza. Que la gente me putee no me gusta. Todo el mundo sabe que soy hincha de Racing, pero que hoy me debo a Boca, que tengo que hacer las cosas para que a Boca le vaya bien, y para eso vine a este club: para demostrarle a todo el mundo que soy un arquero vigente y trato día a día hacer lo mejor para Boca", sentenció Chiquito.

Tras varios año, Romero regresó al Cilindro

Sergio Romero regresó al Estadio Presidente Perón tras 16 años. El arquero surgido de las inferiores de la Academia disputó su último partido en ese estadio el 16 de junio de 2007, en la victoria de su equipo por 4 a 2 ante Godoy Cruz por la última fecha del Torneo Clausura de aquel año. Poco tiempo más tarde, fue vendido al AZ Alkmaar de los Países Bajos, donde fue campeón de la Eredivisie.