La final que no pudo jugar Acuña, la expulsión por doble amarilla y el papel de Paredes

Sevilla se coronó campeón de la UEFA Europa League por séptima vez en su historia. Tras igualar 1-1 con Roma en el tiempo reglamentario y la prórroga en el Estadio Puskas Arnena de Budapest, se impusieron por 4-1 en la tanda de penaltis. Lucas Ocampos, Erik Lamela y Gonzalo Montiel marcaron en la definición desde el punto penal, al igual que Paulo Dybala para los italianos.

El partido empezó con los de José Mourinho dominando el juego y creando las oportunidades más peligrosas sobre el arco de Bono, que estuvo atento ante un disparo de Leonardo Spinazzola. A los 34 minutos de la primera parte, Gianluca Mancini filtró un gran pase para Paulo Dybala, que encaró al portero y definió al segundo palo para adelantar a su equipo.

En el inicio del segundo tiempo, los de José Luis Mendilibar, que mejoraron su rendimiento, consiguieron el empate a los 10 minutos gracias a un centro de Jesús Navas que Lucas Ocampos no alcanzó a tocar pero Gianluca Mancini se la llevó por delante y la introdujo en su propia portería. Los romanos tuvieron más ocasiones de volver a ponerse por delante que los andaluces de remontar, pero fue empate 1-1 que forzó a ir a la prórroga.

Lucas Ocampos, Erik Lamela e Ivan Rakitic marcaron para Sevilla, mientras que Bryan Cristante anotó para Roma pero Bono le detuvo su tiro a Gianluca Mancini, Ibañez lo mandó al poste y llegó el turno de Gonzalo Montiel, que primero tiró a la izquierda de Rui Patricio, que se lanzó y la paró, pero el VAR lo hizo repetir y el argentino esta vez la cambió de lado como en la final del Mundial de Qatar 2022 y le dio el título a su equipo.

¿Por qué no jugo el Huevo? 

Acuña fue expulsado en el partido de semifinales contra la Juventus. El campeón argentino se perdió de jugar ante la Roma por ser echado por doble amarilla durante el encuentro de semis. Una de esas amarillas provocó polémica porque estuvo involucrado su colega Leandro Paredes, ya que fue él el que le dijo al juez que ya tenía amarilla.