Por Eduardo Ayala
Adrián Martínez, el goleador de Instituto de Córdoba, se convirtió en nuevo jugador de Racing Club después de varias semanas de rumores que lo vinculaban con Independiente. La Academia se adelantó al Rojo, que contrató a Gabriel Ávalos como delantero, y se quedó con el pase de Martínez por 2 millones de dólares. El atacante firmó un vínculo con la Academia hasta finales de 2026.
TE PUEDE INTERESAR:
De no creer, el referente que utilizaría Costas en Racing ante Tigre
El nuevo delantero de Racing, dio una entrevista a Radio Mitre después de su presentación oficial junto a otros incorporaciones. Allí reveló que prefirió a la Academia antes que a Independiente, lo que causó revuelo en Avellaneda. Martínez tiene una historia de vida difícil: en 2014, pasó 6 meses en la cárcel por un error judicial. Lo habían acusado de atacar la casa de un hombre que le había disparado a su hermano en el pecho.
No obstante, la Justicia lo dejó en libertad al no encontrar evidencias de su culpabilidad. Maravilla contó a Infobae que ese episodio lo hizo convertirse en un hombre de fe. “Desde que salí de la cárcel, mi vida estuvo enfocada en Dios", así lo expresó el nacido en Campana. De la misma forma que se observó cuando Ronaldinho fue detenido en Paraguay, en las cárceles también hay partidos de fútbol, pero a veces el ambiente se tensa.
"La realidad es que los presos se matan y pasan hambre. La mayoría de los convictos están todo el día drogados o empastillados. No es como en las series, que te pasan la comida con una vianda. En muchos casos, si tus familiares no te llevan la comida no comés. Después de pasar por esa situación, uno mira la vida de otra manera, y disfruta de todas las cosas que a uno se le están dando”, contó Maravilla.
TE PUEDE INTERESAR:
Impacta, el ex jugador de Racing que volverá al Cilindro como rival
El delantero dijo que se aferró a Dios y que el fútbol era un escape: "Adentro se podía jugar, pero había una sola cancha. Y cuando se armaban los partidos, la mayoría salía a descargarse. Se agarraban a puñaladas, porque jugaban con facas. Imagino que Dinho podía jugar más tranquilo, por lo que él representa: lo cuidaban mucho. En mi caso, se armaban quilombos bastante seguido”.
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
29/02/2024
28/02/2024
28/02/2024
28/02/2024
28/02/2024
28/02/2024
28/02/2024
28/02/2024